At Monzalbarba 3-1 SANAN

El Monzalbarba aprovecha el despiste inicial del Sanan
El Sanan comienza el partido con un planteamiento en principio más ofensivo que contra el Eureka, en un campo lleno de agujeros, pero el Monzalbarba sabe las armas que tiene y sabe usarlas:
Una delantero centro muy rápida, fuerte y potente y una defensa libre con visión de juego y golpeo de balón. El resto del equipo muy limitado tanto física como técnicamente, pero en todo caso fuerte y que sabe usar el pelotazo.
En los diez minutos iniciales ya nos había clavado dos goles por el sistema de balón largo a su delantero centro que se va por potencia, fuerza y velocidad y no perdona en el uno contra uno frente a la portera.
En el lance del segundo gol Sara pisa mal en el patatal y se tuerce el tobillo, esperemos que no sea nada.
El Sanan no se rinde y trata de jugar el balón por el centro, pero sin resultados, no somos capaces de aprovechar que su defensa libre jugaba muy atrasada, nuestros tiros son lejanos y sin peligro.
Aún marcará un tercero el Monzalbarba en posición dudosa de su delantero centro, a pesar de que nuestra defensa aprendió a sujetarla.
La segunda parte fue otra cosa, pues las nuestras mostraron más fondo físico y el Monzalbarba dejó de correr, creamos más ocasiones, nuestro gol vino en un penalti, bien tirado por la capitana, fruto de una gran jugada en combinación por la banda derecha con el centro.
Acabamos dominando el partido, el Monzalbarba aún creó dos ocasiones claras con su delantero centro y un par de tiros largos, pero sin consecuencias. Pero nosotras no estamos acostumbradas a tener el balón y todavía nos cuesta combinar arriba y entendernos y anticiparnos.
Y una nota negativa: hubo una tangana en el campo a raíz de una agresión de una jugadora del Monzalbarba que había recibido una entrada por detrás de una jugadora del Sanan. El árbitro lo solucionó con dos tarjetas amarillas, pero podrían haber sido rojas. Así que hay que tener temple y evitar esas situaciones.
En general, el equipo ha mejorado muchísimo desde el principio de temporada, ya sé que algunos aficionados gritamos mucho y en este partido alguna jugadora se ha enfadado un poco con nosotros (espero que no mucho) simplemente pedirle perdón, desde luego que no pretendo ponerlas nerviosas y ya sé que desde la grada el partido todo se ve muy claro.
Ahora que ya somos capaces de tener el balón y jugarlo frente a según qué equipos, las delanteros no hace falta que bajen tanto a por el juego, una por lo menos tiene que estar pendiente del último defensa, para hacer el campo más grande y forzar a correr a equipos como el Monzalbarba, que son más grandes, pero tienen menos fondo físico.
Es cierto que estuvimos empanadas atrás, que nos costó más controlar a ésta delantero que a la del Calanda o a la de la Aragonesa y que tuvo suerte de marcar en sus dos primeras oportunidades, pero lo cierto es que las diferencias más grande entre ambos equipos es la veteranía, la picardía, la envergadura y la fuerza del Monzalbarba.
Nuestra mejor virtud es que somos un equipo equilibrado, en el que todas las jugadoras aportan, todas somos necesarias, pero nadie imprescindible. Hay que seguir mejorando, pero sabed que se ve que la cosa va bien.
Y ahora el último partido de la primera fase, contra el Prainsa Cadete que necesita la victoria para clasificarse para el Campeonato de Aragón. Vendrán a por todas, un equipo muy técnico, muy equilbrado, con jugadoras jóvenes pero con experiencia pero que no debemos amilanarnos, será un partido en casa, totalmente distinto a éste, donde tendremos que usar los recursos que ya hemos demostrado conocer contra la Aragonesa: Máxima concentración atrás, presión en todo el campo y lucha sin descanso.
AUPA SANAN
Rafel